miércoles, 3 de junio de 2015

Carta corta de un recuerdo.

Un recuerdo totalmente vivido... La primera vez que cruce con sus ojos, en aquel momento solo pude observar y grabar su rostro en mi mente, sus pupilas color marrón con un brillo que te cautiva me llenaron de calma, ellos parecían indicarme que nos necesitábamos y, que por supuesto queríamos porque ambos eramos culpables de todo lo que ocurrió, en especial de las cosas buenas, por eso, por sus ojos me declaro culpable de mis actos y aclaro que no me arrepiento de ninguno de ellos. Recordar esos momentos en cierta medida te llena de satisfacción pues a pesar de que ya no siga en pie me alegro de haberlo vivido, cada experiencia me hizo vivir, por ello ella era como el arte pues me hacia sentir algo.